Itzuli

La del Manojo de Rosas

Sorozabal Pablo | Roa Miguel

Musika-bideoari buruzko informazioa:

Interpreteak:

Irudiak:





Iraupena:
1o 47m 39s
Youtubeko izenburua:
La Del Manojo de Rosas (Teatro de La Zarzuela TVE)
Youtubeko deskribapena:
La acción tiene lugar en 1934, en una plaza de barrio madrileña en la que hay un garaje, un bar y una tienda de flores llamada «La del Manojo de Rosas». Se encuentran en la tienda, Joaquín, oficial mecánico del garaje con su aprendiz Capó, además de Don Daniel, el dueño de la tienda de flores y el camarero del bar, apodado Espasa por su afición a usar grandilocuentes expresiones, y romper los moldes del vocabulario. Ascensión, la florista, hija de Don Daniel, es una mocita madrileña de educación esmerada, pero orgullosa de su origen obrero, por lo que no quiere oír hablar de amores más que con un hombre de su clase. Aunque Don Daniel le ha aconsejado aceptar la proposición de Ricardo, joven y simpático aviador, Ascensión a quien quiere es a Joaquín, el mecánico, que le corresponde. Ricardo, tras una conversación con Don Daniel, está convencido de ser el candidato predilecto de Ascensión, y decide ir a declararse, pero al llegar a la puerta de la floristería se encuentra con Joaquín, los dos intercambian bravatas y amenazas. En contraste con este conflicto amoroso aparece otro entre Clarita, una coqueta manicura, Capó y Espasa. Aunque novia del primero, se deja querer por el otro, para así poner a prueba su amor. Espasa, que piensa que Clarita está loca por él, utiliza toda su verborrea para aburrir a Capó con sus camelos y hacerse dueño de la situación. Los padres de Joaquín, son Doña Mariana, mujer simpática y afable, y Don Pedro Botero, así apodado por ser un próspero traficante de chatarra. Ascensión lleva todos los días un ramo de rosas a Doña Mariana, sin saber que es la madre de Joaquín, por lo que, cuando aparece éste vestido como un señorito, comprende la florista que ha sido engañada en su buena fe. Más tarde, Ascensión está sentada en la puerta de su tienda y llega Joaquín, que como si no la hubiera visto en su casa, trata de piropearla. Pero ella le reprocha su conducta y le desprecia. Al enterarse de la ruptura, Ricardo, que no pierde la oportunidad, vuelve a cortejar a Ascensión quien, en su despecho, le acepta como novio delante de Joaquín. Meses después, Espasa, ahora cobrador de autobús, sigue mareando a Capó con su palabrería, que decide pagarle de la misma forma, y con la ayuda de un diccionario gitano, deja a Espasa descentrado y sorprendido. Envalentonado, Capó corteja a Clarita en puro argot faraónico. Por su parte, la relación entre Ascensión y Ricardo, cada día es mas fría, ella recela de todo. Don Pedro Botero se ha arruinado en el negocio de chatarra, y Joaquín tiene que volver al garaje como mecánico, esta vez por necesidad. Joaquín, al ver la frialdad que reina entre Ascensión y Ricardo, siente renacer la esperanza y expresa su cariño por Ascensión, seguro de que ella volverá a quererle. Enterada de la ruina de los padres de Joaquín, Ascensión lleva un ramo de rosas a Doña Mariana. Al salir se encuentra con Joaquín que, emocionado, agradece su delicadeza. Ambos recuerdan con tristeza los días felices de su amor. Ricardo